No sé si el título haya sido precisamente bien escogido, pero fue lo primero que se me vino a la cabeza mientras organizaba las ideas para este post.
Desde hace algún tiempo he conversado sobre el tema con un par de amigas, principalmente porque se han decepcionado de nosotros (los hombres), al final se quedan sin ganas de volver a ver uno ni siquiera pintado en la pared. Hay quienes inclusive cambian su forma de comportarse y de tratar, quedan heridas por dentro y sin poder dejar de pensar en que la siguiente persona con la que se topen les dará igual o peor trato.
Sé que es difícil sobreponerse a una experiencia amarga, pero como comentaba hace unos días con uno de mis panas (el viejo Lucho) , no se gana nada echándole la culpa a los demás, creyendo que todo es culpa del resto, lo mejor es convertirse en parte de la solución.
Por otro lado acepto también que muchas veces nosotros los hombres al pensar más con los genitales que con la cabeza solemos cometer muchos errores (el que diga que nunca ha cometido un error de esos que venga para postularlo a beato y de una vez comenzar a hacerle la estatua). Pero tampoco creo que no seamos capaces de querer y demostrarle a una persona que somos capaces de querer y de enamorarnos.
Un consejo para las mujeres, nunca asuman que nosotros entendimos lo que dijeron o que algo es "sobreentendido", en general nosotros no captamos indirectas, es preferible decir las cosas claras y de frente a que luego aparezcan los problemas justamente por falta de comunicación.
Por otro lado, tampoco creo que sea conveniente caer por una persona utilizando únicamente el corazón. Ya sé que la sensación es impresionante, la velocidad a la que palpita, las maripositas en el estómago al ver a esa persona, etc... Pero muchas veces esta ilusión suele irse al suelo a medida que pasa el tiempo, mientras que en otras ocasiones aquella persona que parecía ser común y corriente que no nos llamaba la atención resultó ser más que interesante y con algo más que sólo pelos en la cabeza.
Algo que sí debe quedar claro es que tampoco estoy recomendando que se vuelvan personas frías, pueden enamorarse si así quieren, pero nunca tomar decisiones apresuradas o creer que las cosas funcionarán por arte de magia. Las cosas funcionan porque nosotros lo hacemos posible, con nuestras decisiones, con el día a día, con el compromiso
A las mujeres en general les digo, no cierren sus corazones, tan sólo enséñenle que cuando quiera amar lo puede hacer, siempre y cuando las decisiones sean tomadas con la cabeza, recordando que tan sólo somos humanos al fin.
Para quienes ya hayan sufrido alguna decepción, va bien una de las frases de una canción que me encanta de los Cruks, Buona Sera.... Vuelvo a comenzar de nuevo, Buona Sera, canto por vivir, Buona Sera, Vuelvo a sonreír.
Una caída tan sólo es el recordatorio de que podemos levantarnos y que somos capaces de tener una nueva oportunidad.