Con el paso del tiempo cada vez es más común ver anuncios de todo tipo que nos dicen cómo bajar de peso sin esfuerzo, cómo tener mejor sueldo sin esfuerzo, inclusive cómo ser felices sin esfuerzo, todo bajo la luz de alguna fórmula mágica o una solución que nos acorte el camino... Es como si quisieran que toda nuestra vida se basara en un infomercial...
Al pasarlo al día a día, todas las personas rompen la cabeza buscando el negocio milagroso que va a aparecer frente a ellos, les va a dar la solución a todos sus problemas e inclusive a lo mejor y hasta les consigue una pareja igual a la que veían en sus sueños. Aderezando un poco más la receta con el sabor criollo y las especias de nuestra sociedad, siempre saltará la idea de la solución más "viva", aquella que evita las colas, los trámites y a veces hasta los pagos.
Si algo he aprendido en el tiempo que llevo en este planeta es que las cosas que se consiguen sin esfuerzo no perduran, nos dejan poco o nada de experiencia y al final hasta se pueden ir en nuestra contra.
¿Entonces? La vida deber ser un sacrificio continuo y debemos pasar nuestra vida sufriendo y padeciendo porque ese es el camino a la verdad? Para nada, lo importante es buscar nuestro camino, lo que nos apasiona, lo que nos hace sentir bien y dar todo de nosotros para conseguirlo, si fallamos? Habremos aprendido algo para que la siguiente vez el error no sea el mismo.
Pero qué pasa si realmente no quiero esforzarme, sólo quiero que las cosas lleguen o sucedan por sí solas... Entonces no esperes recibir otra cosa de la vida, nadie notará si eres bueno para algo a menos que des una señal, ninguno de nosotros es un vidente o profeta para saber quien va a aparecer o ser bueno en un área determinada si no da una señal de que es capaz.
Sin importar la creencia religiosa que cada uno tengan, en ninguna nos dicen cómo será la vida, tan sólo dan un conjunto de reglas a seguir para llegar al cielo, nirvana, valhalla, paraíso, edén... Como le quieran decir, son apenas las líneas que nos dibujan para que creemos nuestro camino... El resto, es nuestra elección.
Y si al final no consigo lo que quería? Pues habrás tenido todo el camino, toda la experiencia, el aprendizaje, los amigos, los conocidos, los buenos ratos, los malos, las alegrías y las tristezas... Aquello que no te pueden quitar ni siquiera al morir... Alguna vez escuché la frase: "Lo importante no es la meta, sino el camino para llegar a ella..." Si bien puede sonar como si no hubiera sentido en esforzarse, creo que es todo lo contrario, si no nos esforzamos nunca sabremos si éramos capaces o no, tan sólo será una idea, una expectativa que divagó en el tiempo sin conseguir nada...