Hace casi dos años que el pequeño Thor (mi Boston Terrier) llegó a casa y era la primera vez que tenía un perro del cual sería su tutor y me haría cargo por completo, además de la parte divertida de tener un cachorro en casa, estaban todas las preocupaciones sobre su comportamiento y especialmente me gustaba mucho la idea de que pudiera viajar conmigo, ir a distintos lugares, etc... Comprendí que no iba a poder lograr eso (y disfrutar del proceso) sin entrenamiento, y no hablo de nivel de competencia, sino de poder tener una buena vida para ambos.
Por ello hice dos cosas, una fue buscar la ayuda de un entrenador canino profesional y adicional a eso, también "entrenarme a mi mismo", aprendiendo cómo funciona el proceso de entrenamiento canino, creo que lo llevé un poco más allá de lo que debía, pero además de ser divertido, me permitió aprender mucho más de lo que esperaba.
Puede sonar muy extraño, pero el comprender el funcionamiento de ese proceso, hizo que pensara mucho en los aciertos y errores cometidos durante mi propia carrera profesional, en la cual lo más común es necesitar trabajar en equipo, liderar y organizarse. Y creo que quizá podemos aprender algo de estos peludos amigos.
Algunos puntos importantes
- Comunicación, la diferencia entre un Líder y un Jefe:
- Un jefe dicta, mientras que un líder guía, al igual que en el entrenamiento de perros. Con un perro puedes gritar, desesperarte, perder la paciencia e igual no vas a lograr los resultados que esperas, porque no logras comunicar correctamente lo que necesitas.
- En el caso del entrenamiento canino, el refuerzo positivo te ayuda a asociar conductas que quieres que se repitan, es decir premias cuando hace algo que quieres que vuelva a hacer, seres humanos y animales respondemos mucho mejor con premios que con castigos, además que se evita romper la conexión, ya que al introducir un castigo probablemente podamos conseguir algunos resultados, pero van a nacer del miedo y no de la confianza.
- Ganar Confianza y Respeto:
- En ambos escenarios, la confianza y el respeto no se dan; se ganan. Construir una relación con tu perro o equipo implica interacciones positivas consistentes. Muestra tu confiabilidad y compromiso.
- Cuando hay una amenaza tu perro y tú funcionan como una manada, donde se apoyan y se defienden de la amenaza, y el perro al verte como líder espera que lo respaldes. Tal y como en un equipo, se espera que el líder esté preparado para moverse con el equipo y enfrentarse a las amenazas de la misma forma, defendiendo a sus miembros, un "alfa" distante va a ser olvidado o inclusive reemplazado fácilmente.
- Refuerzo Positivo:
- Los perros responden bien al refuerzo positivo, al igual que las personas. Reconoce logros, fomenta el crecimiento y concéntrate en los aspectos positivos. Se trata de crear un entorno donde el éxito sea recompensado.
- ¿Qué puede funcionar como refuerzo positivo en tu equipo? Palabras de aliento, un correo de agradecimiento al haber completado una tarea, hasta dar pequeños premios (reconocidos y compartidos) para el equipo, ayudan a mantener la moral en alto y tener en claro que hay que alcanzar esas metas y logros siempre.
- Comunicación Efectiva:
- La comunicación es clave en ambas situaciones. Se necesitan señales claras y consistentes en el entrenamiento de perros, al igual que una comunicación transparente es crucial en la gestión de proyectos. Todos deben estar en la misma página, en el caso de los perros se utilizan señales visuales (por lo general con las manos), señales auditivas (palabras clave que toda la familia debe conocer) o inclusive movimientos específicos. Buscamos evitar confundirlo, puede ser el perro más inteligente del mundo, pero si para lograr que se siente le dicen: sit, siéntate, sentado, assie-toi, etc.. cómo va a saber exactamente lo que quieres que haga, cada comando debe ser claro y bien identificado y que todos los miembros de la familia utilicen la misma palabra y forma de pedirle las cosas, facilita que el mensaje sea entendido rápidamente.
- En tu equipo de trabajo, todos hablan el mismo "lenguaje"? ¿Está correctamente transmitido/compartido el esquema de comunicación? En mi experiencia profesional me he topado con equipos y empresas donde ni siquiera usaban la misma palabra para referirse a algún entregable, inclusive he visto problemas de comunicación entre departamentos porque unos utilizaban ciertos términos, los otros unos diferentes y al final existía retrasos porque no lograban ponerse de acuerdo en lo que X o Y cosa representaba, la lección aquí es no confundir, ser claros, compartir un mismo lenguaje y las mismas claves.
- Adaptabilidad:
- Los perros, al igual que los equipos, tienen personalidades diferentes. Un enfoque único no sirve para todos. Reconoce las fortalezas y debilidades individuales, y adapta tu estilo de liderazgo en consecuencia.
- Las soluciones "one size fits all" demostraron ser poco efectivas hace mucho tiempo, para poder obtener buenos resultados tienes que saber qué características individuales tiene tu equipo, e inclusive elegir a los integrantes de esos equipos en base a las características en común, para poder generar sinergia.
- En el caso de los perros, no elijas un cachorro porque te gusta la raza, o porque te parece "lindo", tienes que entender las características y necesidades de cada raza, además de también conocer el carácter individual del perro que quieres adoptar, cuál es tu estilo de vida? Es compatible con las necesidades de la raza y el carácter de ese perro. Ej: Tienes una vida muy pasiva, vives un departamento y quieres adoptar un lobo siberiano?? Receta perfecta para fallar, son perros de trabajo, con un nivel muy alto de energía y necesitan tener tareas y actividades diarias, un perro de energía baja y mucho más pasivo es lo que necesitas.
- Paciencia y Consistencia:
- El entrenamiento lleva tiempo, al igual que construir un equipo de alto rendimiento. La paciencia ante los desafíos y la aplicación consistente de tus métodos ofrecen mejores resultados.
- Aunque hablamos de barreras de comunicación muy diferentes, el camino es similar ya que probablemente tendremos que probar algunas cosas, volver a intentar, repetir y adaptarnos hasta encontrar la manera correcta de funcionar como equipo, tanto en la relación con nuestra mascota, así como con nuestro equipo de trabajo.
- Comprender las Motivaciones:
- Los perros tienen motivaciones únicas, y tus miembros del equipo también. Descubre lo que los impulsa, lo que los hace destacar. Adapta tu liderazgo para alinearlo con esas motivaciones. Hay perros que les gusta complacer y harán lo que sea con tal de ver una reacción positiva de tu parte, otros que son muy juguetones y querrán obtener tu "aprobación" buscando jugar siempre contigo, acercándote juguetes, etc.
- En el ámbito laboral, qué motiva a tus colaboradores? ¿Sabes cuáles son sus aspiraciones? Cómo puedes lograr que eso funcione a tu favor, quizá alguno quiere aprender porque espera ser un emprendedor, otro quizá quiera ser un líder de equipo, habrá quienes no quieren salir del área técnica porque es lo que los apasiona.
- Utiliza esas motivaciones para que estén en el área indicada dentro de tu equipo, de esa forma ellos estarán satisfechos y será un beneficio mutuo.
Recuerda, no se trata de ser el alfa, sino de crear un ambiente donde todos puedan prosperar. El liderazgo es un viaje de crecimiento, al igual que entrenar a un compañero leal.